Oración de Sello y Protección para los Hijos con la Preciosa Sangre de Cristo
En la vida diaria, todos buscamos la manera de proteger a nuestros hijos de cualquier mal. La fe y la espiritualidad nos ofrecen recursos poderosos para ello, como la oración de sello y protección para los hijos. Hoy te compartimos una oración de sellamiento por los hijos que utiliza el poder de la Preciosa Sangre de Cristo para proteger a nuestros amados hijos.
Índice
Sello de la sangre de cristo por los hijos
En el Nombre de Dios Padre, Dios Hijo, Dios Espíritu Santo, sello y protejo, con el Poder de la Sangre, de Jesucristo el Señor, sello a mis hijos su consciente, inconsciente, subconsciente; ser físico, ser biológico, psicológico, material, y espiritual.
Los sello y los protejo, con el Poder de la Sangre Preciosa, de Jesucristo el Señor, de todo accidente, dentro y fuera de la escuela o trabajo, de cualquier atropello, al cruzar calles o avenidas; de alcoholismo, tabaquismo, drogadicción, sexualidad, sensualidad, lujuria, obscenidad.
Los sello y los protejo, con el Poder de la Sangre de Jesucristo, el Señor, de sufrir algún secuestro, secuestro, o de la enfermedad de la Influenza; de sufrir algún robo, abuso de autoridad, por parte de cualquier maestro, o abuso de cualquier compañero; de riñas dentro y fuera de la escuela, o de su trabajo.
Los sello y los protejo, con la Sangre de Jesucristo, el Señor, de pandillerismo, de algún mal golpe, de caerle mal a alguien, de venganza, de apatía, de indiferencia ante cualquier dolor ajeno, de indiferencia a la Eucaristía, de desprecio a la virginidad, desprecio al respeto a los adultos, y a los propios padres.
Los Sello y los protejo con el Poder de la Sangre de Jesucristo, el Señor, de cualquier maldición, de parte de cualquier maestro, compañero, o jefe de trabajo, u otras personas. De abuso de autoridad, física y verbal, psicológica y mental. De cualquier persona que los quiera engañar, sonsacar o involucrar en cualquier problema que no les corresponda.
Los sello y los protejo con el Poder de la Sangre de Jesucristo, el Señor, de cualquier desilusión, obsesión, depresión; enfermedad física y mental. Señor Jesucristo ¡derrama tus Bendiciones sobre mis hijos! ¡Derrama tu Preciosa Sangre sobre su cerebro!, para que tengan buena retención en sus clases. Que tu Sangre Señor Jesucristo, fluya por sus venas, y Señor Jesús ¡escóndelos en el Corazón Inmaculado, de la Santísima Virgen María! En el Nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
Importancia de Encomendar a los Hijos a Dios
Encomendar a los hijos a Dios es fundamental para muchos padres, con el objetivo de asegurar su bienestar físico, emocional y espiritual.
Fe y Confianza en la Protección Divina
La fe y la confianza en la protección divina son pilares esenciales en la vida de muchos creyentes. Al encomendar a los hijos a Dios, los padres depositan su esperanza y confianza en que Él cuidará y protegerá a sus seres queridos.
Esta confianza no solo refuerza la fe de los padres, sino que también crea un ambiente de seguridad y tranquilidad en el hogar. Creer en la protección divina permite a los padres afrontar las preocupaciones y desafíos diarios con una actitud más serena y esperanzada.
Amor y Devoción de los Padres
La oración por los hijos refleja el amor y la devoción de los padres hacia ellos. Mediante la oración, los padres no solo buscan protección divina, sino que también expresan su amor profundo y su deseo de lo mejor para sus hijos.
El acto de orar por los hijos es un testimonio de la dedicación y el compromiso de los padres para asegurarse de que sus hijos estén siempre resguardados y bendecidos. Esta devoción fortalece los lazos familiares y fomenta un ambiente de amor y apoyo incondicional.
Papel de Jesucristo y el Espíritu Santo
En la encomienda de los hijos a Dios, Jesucristo y el Espíritu Santo son muy importantes. Jesucristo, como el Salvador, ofrece su protección y guía a través de su amor redentor. Al pedir su intercesión, los padres confían en su presencia constante y en su capacidad para proteger a sus hijos de cualquier mal.
El Espíritu Santo, por su parte, es fuente de sabiduría y fortaleza. Al invocar al Espíritu Santo, los padres buscan que sus hijos sean guiados por la luz divina, tomando decisiones sabias y alejándose de las influencias negativas. La presencia del Espíritu Santo también proporciona consuelo y paz a las familias, asegurando que siempre tengan la fortaleza necesaria para enfrentar cualquier adversidad.
El Sello de la Sangre de Cristo
El Sello de la Sangre de Cristo es una poderosa oración de protección espiritual, especialmente en las oraciones por los hijos.
Significado del Sello
El Sello de la Sangre de Cristo representa la cobertura y protección divina otorgada a los creyentes a través del sacrificio de Jesús.
La Preciosa Sangre de Jesucristo
La Preciosa Sangre derramada por Jesucristo tiene un profundo significado en la fe cristiana. Es considerada un símbolo de redención y protección, invocando su poder para resguardar a los hijos de cualquier peligro. La sangre de Cristo es vista como un escudo que protege el cuerpo y el espíritu.
Protección Espiritual
El Sello de la Sangre de Cristo no solo ofrece protección física, sino también defensa espiritual. Este sello actúa como una barrera contra las influencias malignas y espirituales negativas. Es un llamado a la misericordia y al poder redentor de Jesucristo para salvaguardar a los hijos en su vida diaria.
Pedir Protección de la Sangre de Cristo
Durante esta oración, se pide que la Sangre de Cristo cubra y proteja a los hijos, solicitando su protección contra enfermedades, accidentes y cualquier tipo de adversidad. Se invoca a Jesucristo para que su sangre actúe como un manto de protección completa y continua.
Fortalecer la Fe a Través del Sello
El acto de sellar a los hijos con la Sangre de Cristo también tiene como objetivo fortalecer la fe de los padres y de los propios hijos. Al confiar en su poder protector, se refuerza la creencia en la providencia y misericordia divina. Esta práctica ayuda a establecer una base sólida de fe y confianza en Dios.
Sigamos Orando por Nuestros Hijos: Fortaleciendo su Protección Espiritual
En nuestras vidas, la protección de nuestro Señor es un pilar fundamental para asegurar el bienestar de nuestros hijos. Al seguir orando por nuestros hijos, depositamos en las divinas manos de Dios nuestras preocupaciones y temores, confiando en que Él los guiará y protegerá.
El nombre de nuestro Señor Jesucristo es invocado para alejar cualquier adicción, manipulación o comportamiento compulsivo que pueda afectar la vida de nuestros hijos. A través de la oración, pedimos que sean liberados de la falta de perdón y que puedan recibir el perdón que sana y fortalece. Al invocar la luz del Evangelio, buscamos que nuestros hijos puedan ver la luz y ser guiados por el camino correcto.
Es esencial reconocer que la falta de perdón puede llevar a la soberbia y a otros problemas que afectan tanto la mente como el comportamiento mental. Por ello, pedimos que nuestro Señor les conceda la fuerza espiritual necesaria para superar cualquier obstáculo y para que permanezcan firmes en su fe.
A través del Sello de la Sangre de Cristo, confiamos en que nuestros hijos estarán protegidos no solo físicamente, sino también espiritualmente. Sigamos orando sin cesar, poniendo la vida de nuestros hijos en las manos misericordiosas de Dios, agradeciendo su amor y protección continua.
Al final del día, agradecemos por amarlos y por guiarlos en cada paso que dan. Es nuestra responsabilidad como padres mantener esta fe viva y seguir pidiendo que nuestros hijos sean siempre puestos en las manos de Dios, confiando en su infinita misericordia.
Más oraciones de protección
